LOS 10 SÍNTOMAS DE ESTRÉS EN EL CUIDADOR

1. Negación de la enfermedad y su efecto sobre la persona que ha sido diagnosticada 
   
   "Sé que se va a poner mejor"
   "Se le pasará, esto es algo pasajero"
   "Yo no la veo tan mal como los demás dicen"
    
2. Enfado con la persona que padece la demencia; indignación por no existir cura o por no entender lo que está pasando
   
   
   "¡Si me lo pregunta una vez más, reviento!"
   "Lo hace para fastidiarme"
   "Aquí nadie me dice ni me explica nada"
   "¿Por qué me tenía que pasar esto a mí? Soy un/a desgraciado/a" 
     
3. Aislamiento social de amigos y de actividades que antes eran placenteras
   
   
   "No me apetece quedar ni ver a nadie"
   "Nadie me entiende porque nadie sabe por lo que estoy pasando"
   "No tengo ganas de nada ni de nadie"
    
4. Miedo al futuro
   
   
   "¿Qué pasará cuando esto vaya a peor?"
   "¿Podré con todo esto yo solo/a?"
   "No quiero ni pensar en el futuro porque todo pinta negro" 
    
5. Depresión que empieza a afectar a tu estado de ánimo y a tu capacidad para afrontar la enfermedad
   
   
   "Ya paso de todo, no puedo hacer nada"
   "He dejado de preocuparme"
   "Esto es una desgracia, no puedo hacer nada para solucionarlo"
    
6. Agotamiento que hace casi imposible la realización de las tareas diarias necesarias
   
   
   "Estoy demasiado cansado/a para esto"
   "No me quedan fuerzas para nada, esto está acabando conmigo"
   "Parece que sólo vivo para cuidar, lo demás es secundario"
    
7. Falta de sueño causada por una lista interminable de preocupaciones
   
   
   ¿Y si sale fuera de casa?
   ¿Y si la dejo sola y se cae o le pasa algo?
   ¿Y si les habla a desconocidos y los demás piensan que está loca?
   ¿Y si se hace daño a sí misma?
   ¿Y si se fía de desconocidos y la engañan?
   ¿Y si...?
    
8. Irritabilidad que conlleva cambios de humor y que desencadena respuestas y acciones negativas
   
   
   "¡Déjame en paz!"
   "Me estás poniendo nervioso/a"
   "¿Por qué no te vas y me dejas tranquilo?"
   "El que carga con todo soy yo, tú no sabes lo que es cuidar"
    
9. Falta de concentración que hace que sea difícil llevar a cabo las tareas familiares
   
   
   "Estoy tan estresado/a que ya no me acuerdo de nada"
   "Se me ha olvidado hacer esto del cansancio que llevo encima"
   "No sé qué me pasa pero no puedo concentrarme" 
    
10. Problemas de salud que empiezan a aparecer física y mentalmente
    
    
    "No recuerdo la última vez que me sentí bien"
    "Ya no disfruto de nada de lo que hago"
    "Es como si no tuviera ilusión por las cosas"
    "Ya no tengo la misma alegría de antes"
    
    
    
    
    
    
    ¿Cuántas veces habéis pensado algo de esto?
    ¿Cuántas veces os habéis sentido así?
    
    
    
    Si eres cuidador/a y te sientes identifidado/a con una o varias de estas frases o expresiones, puede que estés comenzando a sentir en tu propia piel el estrés típico del cuidador. Es algo natural, previsible, pero que no te beneficia ni a ti ni a la persona a la que cuidas. Busca ayuda, consulta a expertos, habla y desahógate con familiares, amigos, personas que sabes que te van a escuchar y al menos van a intentar comprenderte y, si pueden/saben, ayudarte y darte buenos consejos. Y sobre todo intenta buscar el tiempo y el lugar para compartir con otros cuidadores, intercambiar experiencias, sentimientos, opiniones. Porque la carga compartida, se hace más llevadera. Y lo que parece que lo que vive uno mismo sólo le pasa a él y a nadie más, en realidad es la misma situación que muchas personas viven pero que no comparten con otros y se la guardan para sí.  
    
    
    *Fuente: CRE Alzheimer